Era lunes, y como todos los lunes el alma me pesaba ahí mismo, abajo del saquito de los cojones. Una tarde pensé que el alma era una tercera bola que llevaba ahí colgando y que me servía tan poco como me servían las otras dos. Desde entonces, cuando es lunes y el alma me pesa, cuando es otro día y el alma me pesa, hasta cuando no sé qué día es y el alma me pesa, siento ese bulto y esa carga abajo del todo, peleando con la tela elástica del slip.
Así comienza la fantástica novela española “La flaqueza del bolchevique”, del escritor Lorenzo Silva (abogado madrileño nacido en 1966). Con esta novela, Lorenzo consiguió quedar finalista en el premio Nadal en 1997.
Un lunes a las ocho de la mañana, el protagonista empotra su coche contra el de una ejecutiva que, al salir, le cubre de insultos. En ese momento el hombre decide dedicar su existencia a amargar a la mujer y hacerle la vida imposible, para, además, entretenerse y olvidarse por un momento de su monótona vida gris. Pero al acercarse a la ejecutiva descubre que tiene una hermana de quince años que pronto se convierte en su debilidad.
Opinión personal:
Admito que no acostumbro a leer novela española. También admito que no acostumbro a leer novelas que no tengan un puntito fantástico, pero hace años encontré este libro en la estantería de mi madre y desde entonces lo tengo secuestrado en mi cuarto. Poco después estrenaron una película y pude ver en imágenes lo que ya había leído previamente… y me gustó.
Es una novela muy entretenida. Se hace tremendamente corta, y es uno de esos libros que merece la pena comprarse y tener en la estantería, porque una vez cada año vuelven a dar las ganas de echarle un ojo. Los protagonistas son encantadores, y cuando llevamos ya varias páginas leídas, estamos tan metidos en la historia que odiamos a quienes los personajes odian. Que esto ocurra en una novela me parece algo difícil de conseguir y que yo valoro muchísimo.
El ritmo es muy bueno. Las cosas fluyen y en un principio no se sabe hacia dónde van a ir, porque ocurre todo tan naturalmente que no hay momento en el que te lo plantees. Sabes que todo va rondando y que acabará de una manera u otra.
¿El género? En este caso no lo tengo yo muy claro. ¿Romance? ¿Novela blanca? ¿El transcurso de la vida? Una mezcla de situaciones. Como ya dije al hablar del ritmo, es difícil de poner un punto en la trama, sino que se convierte en una madeja imposible de desenredar. Muy sencillito, muy agradable.
Una novela harto recomendable. Y sí… podéis ver la película si queréis, pero el libro aporta muchísimas cosas más :P
(P.D: ¿No os pasa que odiáis encontrar solamente la portada que hicieron después de hacer la película de un libro? ¡Es odioso!)
¿Has leído algo más de Lorenzo Silva? Él es de Getafe, y mientras viví allí leí su llamada "trilogía de Getafe", unos libros juveniles pero bastante bonitos, y bastante buenos para ser simplemente "literatura juvenil", esa gran olvidada.
ResponderEliminarPues no, no he leído nada más de Lorenzo Silva (o sí y no recuerdo que fuera suya), pero mi madre sí leyó cosas suyas hace tiempo y está encantada con ese hombre. Desde luego, si el resto de sus novelas tienen la frescura que esta, me gustaría seguro ^^
ResponderEliminarMenos mal que te estás desintoxicando un poco del pelma ese de Víctor Conde.
ResponderEliminar@Supergal: XDDDDDDDDDDDDDDDDDDD
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