jueves, 24 de mayo de 2012

La chica y el café



Erase una vez, una chica que no bebía nunca café. Un día decidió que tenía que comenzar a estudiar en serio y se tomó una taza después de comer, antes de ir a la biblioteca.
          Esa noche, se hicieron las dos de la mañana, y la chica no podía pegar ojo. Y aprendió una importante lección: o lo tomas más a menudo para que no te haga tanto efecto, o no lo tomas nunca.


Esta, señores lectores, es la historia de mi vida. 

3 comentarios:

  1. Irónicamente, estoy tomando café right now. Jej. Saludos Azufre. Hace tiempo que no me paseaba por acá.

    Juano

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  2. Ah, pues vale...

    ¿Y a esto tú lo llamas "microrrelato"?

    Si es así, en conclusión, este comentario es otro.

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  3. Anónimo: es un microrrelato en cuanto a extensión, por lo poco que dura. Que no te parezca bueno es otra historia, y en ese caso, creo que deberías explicar por qué. Vamos, digo yo. Por sacarle algo de provecho a tu comentario.

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