lunes, 14 de marzo de 2011

La ovejita y el pastor



                  Había una vez, hace muchísimos años, una ovejita que no era como los demás. En el prado donde todos pastaban con tranquilidad ella se sentía intranquila. Intuía que en medio de toda aquella pradera se escondían peligros inimaginables.               
    Cuando les comentó estas inquietudes a sus padres, a éstos se les encogió la lana de la sorpresa.
                -¡Pero cariño, cómo va a ser peligroso! –le dijo su padre.
                -Lo llevamos haciendo siglos –prosiguió su madre.
    La ovejita entendió que iba a ser imposible convencerles de los peligros, y decidió emprender un viaje para intentar aclarar las ideas revolucionarias de su cabeza.
                La ovejita caminó durante días hasta que se topó con un animal extraño que no tenía pelo en el cuerpo y caminaba a dos patas en vez de a cuatro. Se dio cuenta de que ese extraño ser protegía en su casa a otros animales y les proporcionaba calor y comida.
                La ovejita vio la salvación de toda su familia. Se dejó ver por el extraño animal sin pelo, y luego escapó dejándose perseguir, guiándole hasta donde su rebaño vivía desde hacía siglos.
                Después de todo, la ovejita consiguió lo que se había propuesto: el animal sin pelo llevó a todas las ovejas hasta un establo, donde las alimentó y protegió de las fieras salvajes.
               
A pesar de todo lo que le habían dicho sus padres, la ovejita siguió el camino que ella creía correcto y así consiguió salvar a toda su familia. Y lo consiguió precisamente porque no se mermó ante las opiniones contrarias de todos.


Para todos aquellos que tengan ideales y sepan que van por el buen camino. No os desaniméis ;)

6 comentarios:

  1. Espero que el señor sin pelo finalmente no decidiese montar una carnicería... Y bueno, ¿este es el origen de "la oveja negra" de la familia?

    Me ha gustado, aunque me ha recordado demasiado un cuento (a mí poner la moraleja no me gusta, queda muy moralizador, aunque son cosas mías).

    Mi más sincera enhorabuena.

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  2. Carlos, es que la historia de la ovejita es un ejercicio de fábula. Y las fábulas tienen que tener una moraleja final.
    Gracias por leerlo ^^

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  3. Me gusta la moraleja, aunque ya sabes que yo le hubiera puesto algo más oscuro, como que el señor mataba a las ovejitas. No sé qué me ocurre últimamente.... Pero entonces ya no hubiera tenido moraleja, así que está perfecto como está :)

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  4. Mola, peor le falta el final, la parte en la que el animal sin pelo, luego de haberlas encerrado, se las come :)

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  5. Que malos sois todos. ¡Dejad de fastidiarme el cuento tan bonito! :P
    En mi historia, los hombres sin pelo solo las usan para coger la lana y hacer abrigos ;)

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  6. Jajaja, lo que me reido Azufre! Pero aclarado el punto de que el animal sin pelo no se comerá las ovejas, qué come? Es vegetariano, verdad?

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